No dudes que aun hoy sigo siendo aquella niña pequeña que necesita que la protejan de vez en cuando. Después de tantos años sigues aportándome esa seguridad que me empujó a descubrir el mundo por mi misma. Porque sé que de caerme estarás ahí para tenderme la mano y saber que me obligarás a levantarme y a intentarlo de nuevo me hace querer seguir adelante.
Gracias por estar siempre a mi lado y no subestimarme. Sin ti no sería como soy.
-Gracis per tot, t'estim-
No hay comentarios:
Publicar un comentario